jueves, 30 de septiembre de 2021

UNA DE LAS PRINCIPALES CLAVES

Soy tercera generación de Cristianos evangélicos en mi familia, “nacido y criado en cuna de oro evangélica” (como dicen en nuestro ambiente Cristiano) Nunca me “descarrié” ni me aparte De Dios en toda mi vida. (Lo mismo mi esposa). Tengo la honra de haber sido  Nieto de Pastores, soy hijo de Pastores y en la actualidad oficio como pastor evangélico en la comuna de Renca. 

En mis 46 años de vida me han preguntado solo en un par de ocasiones: “cuál es la clave para permanecer firme en el evangelio por tanto tiempo?”    

Tal vez Muchos se sorprenden con mi respuesta (a lo mejor esperaban algo más “espiritual” como “la oración y ayuno”) pero la verdad es que aparte de consagrar nuestra vida al servicio de Cristo y estudiar la palabra, creo que la principal clave para mantenerse firme a través del paso de los años y perseverar en tiempos tan difíciles como estos, creo que la clave es:


NO DEJAR DE CONGREGARSE, esa es la clave!


Me he dado cuenta en mi peregrinar en esto del evangelio que aquellos que tienen una vida regular de congregación sistemática y fluida (al menos unas 2 veces por semana)  son quienes tienen mayor oportunidad de triunfar y resistir los embates del tiempo.


Es cierto, no es una clave infalible, pero hay más esperanza y oportunidad en quienes se congregan que en aquellos que no lo hacen o lo hacen de manera esporádica. 


Si me preguntan, creo firmemente que el tiempo que invirtió mi abuelo QEPD y mis padres en llevarnos desde bebés al templo cada miércoles viernes y domingo (sin faltar nunca ojo ni en invierno ni verano, ni siquiera por cuestiones escolares) creo que eso fue lo que profundizó de tal manera nuestros cimientos que hoy es virtualmente imposible que algo o alguien nos aparte del evangelio.


Hoy tengo tres hijos pequeños en edad aún (aunque Isaac con sus 12 años ya está de mi porte Jejeje) y con ellos he repetido el mismo patrón: CONGREGARSE NO ES NEGOCIABLE.

Ellos saben que primero está Dios luego la familia y tercero LA IGLESIA y de ahí todo lo demás. 


Sin embargo veo con mucha tristeza como, sobretodo hoy en día, muchísima cristiandad ha olvidado (o ignoran voluntariamente) este principio y CLAVE tan vital para el desarrollo de su vida como Cristianos y la de sus hijos y los hijos de sus hijos. 

Un tío mío, el reconocido pastor ERNESTO SILVA, me dijo cierta vez: “ José Luis, Dios es un Dios generacional, el no solo llamó a tu abuelo, si no que a través de él llamo a tu padre y a ti y a los tuyos en un futuro”


Dios le prometió tantas cosas a mi abuelo, muchas se cumplieron y otras tantas aún no, lo mismo a mi padre... pero se que Dios cumplirá sus promesas en mi generación! Y lo que le prometió a mi abuelo y a mi padre lo veré yo, y lucharé por ello y de no verlo yo lo verán mis hijos! Eso se llama LEGADO.


Para concluir, te invito a reflexionar un poco, y preguntarte: “ me congrego regularmente”? 

O tal vez ni siquiera te congregas (porque “vía online o zoom “ no cuenta ojo, no cuenta porque en estricto rigor no hay congregación física como enseña la palabra) una cosa es “conectarse” y otra muy diferente es “congregarte”.


Piénsalo! Si te preguntas: “porque me siento tan vacío y débil ?” O “porque hijos no quieren nada con Dios ni con el evangelio ni con la iglesia?” La respuesta es más “sencilla” de lo que crees: DEJASTE DE CONGREGARTE. 


Por lo tanto, Te ánimo de todo corazón a retomar este “buen hábito”, ahí está LA CLAVE principal de tu éxito en esto del evangelio. 

(Y te lo dice alguien que sabe un poquito del tema )


Sin más... solo CONGREGATE! 

(“Presencialmente” como dirían en estos tiempos) 


Con cariño 

Pastor José Luis Ríos Recabarren 

Pastor ICF


Pd. En la fotografía mis padres mis hermanas y yo Jejeje 

Bendiciones!